Hace años, tras el concilio Vaticano II y antes de que se abriera paso la democracia en España, quedó claro que, contra la imagen que muchos tenían de que los cristianos son de derecha, la fe cristiana, vivida en su integridad evangélica, orientaba a muchos cristianos no sólo al voto sino a la militancia en partidos de las diversas izquierdas. En el compromiso político, una cosa es la inspiración común a favor de la justicia social y la defensa de los derechos humanos y otra las mediaciones políticas por las que cada uno libremente opta.··· Ver noticia ···