Os convocamos a la presentación de la biografía “Pedro Leoz. No robaréis mi fe” de José Luis Díaz Monreal.
Pedro Leoz, misionero y sacerdote, ya fallecido, fue el primer presidente de la Plataforma de Defensa del Patrimonio Navarro.
Nuestra Plataforma, junto con la asociación “Redes Cristianas” y la Fundación Altaffaylla han coeditado este libro, homenaje a un navarro comprometido con los pueblos, con los pobres y con el patrimonio público.
Lunes 27 de Junio
A las 11:30
Librería Elkar (Calle Comedias) de Pamplona-Iruña
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Bibliografía y Sinopsis
José Luis Díaz Monreal (Iruña 1943). Ha publicado los ensayos, La historia olvidada (2009), Las huelgas de Potasas (2012), y La huelga de 1951 y otros conflictos en Navarra durante los años cincuenta (2013). La biografía, Jacinto Ochoa, la prisión más larga (2013). La novela, El robo de la catedral (2017) y la colección de relatos, La Cueva de la Luna (2019).
Biografía del sacerdote Pedro Leoz Cabodevilla, desde sus orígenes en Cáseda, hasta su fallecimiento. Ochenta y siete años de vida íntegra, solidaria, valiente, comprometida siempre con las luchas de los desfavorecidos y las libertades de los pueblos. Nunca se doblegó ante los que detentaban el poder, fueran políticos, militares o eclesiásticos.
Fue así desde el Seminario de Pamplona; su paso por la parroquia de Caparroso; misionero en Ecuador; cura obrero en Venezuela; revolucionario sandinista en Nicaragua y militante de la guerrilla de las FPL en la guerra del El Salvador.
Regresó a Navarra con 67 años y continuó sus luchas denunciando las injusticias y en favor de las libertades. La edad y su quebrantada salud no fueron óbice para que como concejal del Valle de Egües, tuviese un destacado papel en la lucha contra la corrupción. Sobre todo, se implicó en la denuncia de las inmatriculaciones que la Iglesia navarra estaba llevando a cabo, y presidió la “Plataforma en Defensa del Patrimonio Navarro”. Por dos veces el arzobispado de Pamplona le retiró la pensión que como sacerdote le correspondía.
Tal vez, como dicen algunos, el Arzobispado descansó con su desaparición. Con este libro, Pedro vuelve al camino, con la adarga al brazo.